Como sucede en los humanos, su mascota es susceptible a enfermedades. La gran diferencia es que los perros tienen la capacidad para tratar con eficacia y, en algunos casos, se enferman debido a la atención inadecuada de sus dueños. Las infecciones del oído son un problema que la gente y los perros comparten. Es un problema común en los niños pequeños y cachorros por igual, pero no es raro que suceda en los animales más viejos también. Las infecciones del oído pueden resultar problemáticas para los perros porque no tienen manera de aliviar el malestar, aparte de rascarse vigorosamente o masticar si se puede llegar a sus oídos, que pueden causar aún más daño al oído. El problema es que puede ser difícil saber si esto es parte del comportamiento normal del perro o si tiene una infección de oído que puede ser que necesite tratamiento y atención médica. Hay otros síntomas que se pueden ver por ejemplo si su perro demuestra una pérdida de equilibrio o si hay costras, acumulación tanto en el exterior como en el interior de la oreja. Otros síntomas incluyen la pérdida de audición o si descubre secreción con sangre y / o amarillo combinado con inflamación del oído mismo. Este tipo de infecciones no son peligrosos para la vida de su perro, pero pueden ser muy incómodas para el animal y si usted sospecha que su perro tiene una infección debe consultar acerca de llevarlos a un veterinario para determinar la causa exacta de la infección para poder ser tratado.
Una infección del oído puede ocurrir por una variedad de razones, de la infección las bacterias a los ácaros, dependiendo de la edad del perro y sus condiciones de vida. Los ácaros, por ejemplo, son mucho más comunes entre los cachorros. Otra causa de la infección del oído se crea sobre la humedad en el interior de la oreja de su perro cuando se ha bañado, que fomenta el crecimiento de microorganismos que necesitan ser tratados antes de que ocasionen molestias graves a su perro. Crecimientos bacterianos y de levadura se aprovechan del exceso de agua y los residuos pueden crear en el interior del propio oído que necesita ser desalojado y eliminado con una limpieza a fondo. La limpieza de oídos puede provocar daños en el oído de su perro o incluso a la ruptura del tímpano, que termina siendo un problema mucho más serio que una simple infección del oído.
Lo mejor es pensar que el interior de la oreja de un perro es como una gran erupción que requiere un toque suave y una limpieza con medicamentos y productos que no irriten la piel inflamada. Usted debe evitar el uso de alcohol y utilizar una solución de limpieza del oído suave que su veterinario le recomendará a usted, basado en las necesidades de su perro. Es aún más importante que utilice la técnica adecuada para limpiar su oído. Comience por verter la solución en el oído de su perro y luego poner una bola de algodón sobre la parte superior de la misma, a continuación, empezar a masajear suavemente en la base de la oreja de su mascota. La bola de algodón absorberá el exceso de líquido y los residuos arrastrados se pegará a la bola de algodón. Un punto aún más importante es que usted tiene que secar adecuadamente el oído de su perro después de la limpieza para asegurar que no hay otra infección. Si usted permite que su perro sufra de una infección de oído durante mucho tiempo, es posible que note que la oreja de su mascota comienza a hincharse y tener mal olor, lo cual es una señal de que la sangre no circula bien y en el cual, en el peor de los casos, requerirá una cirugía para reparar. Las infecciones del oído pueden ser incómodas y dolorosas para su mascota, por lo que es necesario tener especial atención en su perro cuando haya vuelto un baño o todo lo relacionado con el agua y la humedad.
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